Una de las más extraordinarias tradiciones mexicanas es la del día de muertos. Los orígenes de la celebración del Día de Muertos en México, datan desde la época de los indígenas de Mesoamérica, tales como los Aztecas, Mayas, Purépechas, Nahuas y Totonacas. En la actualidad, se conserva esta ceremonia popular que invoca a los espíritus de los ancestros para invitarlos a convivir en el mundo terrenal, por lo que se procura agasajarlos en la forma más atenta para que a las ánimas de los difuntos puedan visitar a sus parientes. La celebración se lleva a cabo en dos días: el 1 de noviembre es dedicado al alma de los niños y el 2 de noviembre a la de los adultos. Es una tradición que nos conecta con nuestros seres queridos a quienes nunca olvidaremos.
Gastronomía, arte y tradición se mezclan en un ambiente nostálgico que recuerda a los que se han ido. Cada año, los días 30 y 31 de octubre, 1 y 2 de noviembre, puedes ser parte de este gran festejo donde podrás disfrutar de los platillos tradicionales de la región, dulces típicos, rituales alusivos al Hanal Pixán (comida de ánimas), talleres, artesanías, ofrendas y altares, exposiciones de artes visuales, teatro, danza y conciertos de gala.